jueves, 14 de mayo de 2015

Villa Ester tiene dos caras



















Para darse cuenta basta con poner un pie en el barrio y dar una mirada a su alrededor.
La brecha de los vecinos que de a poco progresan y los que realmente no tienen nada, los que conviven al lado del arroyo contaminado; Si usted es más audaz que cualquier "simple" turista y está dispuesto a conocer la realidad más allá de las atracciones culturales y naturales del país, le bastaría con "visitar" La Copa de leche para todos o caminar por las calles de las zonas para poder sentir, vivir y hasta "oler" la pobreza.
Le aseguro que no olvidará jamás semejante experiencia y su punto de vista sobre lo que es enfrentar problemas y vicisitudes, cambiará para siempre, pero incluso, si usted no se atreve a tanto, la realidad de los más pobres no podrá ocultarla, aunque vaya de visita solo al centro de Florencio Varela.
En cualquier esquina, en cualquier semáforo, usted podrá ver niños vendiendo frutas, haciendo piruetas o lavando vidrios de los autos; incluso podrá ver ancianos y jóvenes, hombre y mujeres, pidiendo dinero o en sus carros de ventas ambulantes hasta bien entrada la noche.
Estas dos caras de la moneda ocurren aunque la coyuntura macroeconómica de Buenos Aires, parece funcionar a las mil maravillas, la inflación es menor al dígito, la tasa de cambio se mantiene estable y la cifra oficial de desempleo está por debajo del 3%. En un mismo lugar conviven 450 mil argentinos, los que tienen mucho y aquellos a los que Dios y el municipio parecen haber olvidado. Ya está comprobado que la estabilidad macroeconómica es importante pero no basta. Si el gobierno quiere el bienestar social, entonces deberá apostar por un modelo económico que permita el crecimiento sustentable.
Los niños de la copa de leche, los niños de Villa Ester, los niños de algunos sectores de Florencio Varela necesitan ayuda, sacarlos de la pobreza, sacarlos de al lado del arroyo que los enferma, los contamina. Al igual que miles de niños valerenses sueñan con dormir en una cama y poder jugar como cualquier niño. Pero hasta el momento, las autoridades en su conjunto, no se lo permiten...
Ojalá que aquellos que tomen las riendas del nuevo gobierno luchen para que Argentina tenga una sola cara. De más está decir cual...                                                                                                                                    

                                                                     Copa de leche para todos.    
                                                                      
                                                        Secretaría de prensa y difusión Cañetes Debora.

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