EXCLUSIVO Sucedió en una casaquinta en la localidad bonaerense de Florencio Varela. La víctima, de 63 años, fue encontrada con dos balazos en el estómago y con las manos atadas con precintos plásticos. Las autoridades policiales descartaron el robo como móvil del crimen y consideran que el sexagenario habría sido agredido por venganza.
Las autoridades policiales realizaron ayer diferentes diligencias con el objetivo de localizar a los individuos que, el sábado pasado, asesinaron salvajemente a balazos a un prestamista, de 63 años. Tal como Crónica adelantó en exclusiva en su edición del domingo, el sexagenario fue agredido por los marginales, tras haber arribado a su casa quinta, en la localidad bonaerense de Florencio Varela. Los investigaciones consideran que este crimen habría sido llevado a cabo por venganza, ya que antes de atacar al hombre, previamente los delincuentes le ataron las manos con precintos plásticos. No se descarta que el fusilamiento haya sido consumado por un grupo de sicarios.
Los voceros revelaron que la infortunada víctima, identificada como Daniel Arturo Slaven, de 63 años, fue hallado el sábado pasado en el jardín de su casaquinta, situada en el cruce de Florida y Río Colorado, en el citado distrito, en el sur del conurbano provincial.
Trascendió que el individuo tenía las manos atadas con precintos plásticos y que presentaba 2 certeros impactos de bala en el estómago.
Pesquisas policiales destinados en la comisaría 1a de Florencio Varela consideran que el asesinato habría sido perpetrado en la madrugada del sábado pasado, ya que se estableció que en la noche del viernes Slaven había cenado con su novia. Después esta mujer intentó comunicarse telefónicamente con el sexagenario, aunque el hombre nunca respondió esos llamados.
Según manifestaron los informantes, Slaven arribó a la vivienda en una camioneta Toyota Hilux y fue interceptado por los delincuentes mientras se disponía a introducir este vehículo en el garage del inmueble.
Habitantes del vecindario dijeron que Slaven efectuaba tareas como prestamista y que vivía solo en esa casaquinta. El domicilio contaba con un circuito cerrado de televisión, pero, antes de escapar, los agresores sustrajeron un CPU, en cuyo interior se guardaban las imágenes captadas por las cámaras de vigilancia. El garage se encuentra a 15 metros de la vivienda de la víctima. Los investigadores descartaron el robo como móvil del asesinato, aunque se estima que los criminales habrían sustraído algunos papeles que habrían estado colocados en una caja fuerte.
Intervino en la causa, que fue caratulada “Homicidio”, la doctora Vanesa Maiola, fiscal de la Unidad Funcional N° 6 de Florencio Varela, dependiente del departamento judicial de Quilmes.
cronica.com.ar
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