domingo, 7 de diciembre de 2014

Ante el Halcón, Olimpo volvió a mostrar un vuelo demasiado bajito



El empate sin goles ante Defensa y Justicia dejó un sabor amargo en el cierre del torneo de Transición. La campaña del aurinegro es apenas discreta, con solo 12 puntos conseguidos en condición de local.



Pese a que decoró el cierre de certamen con una rachita de 5 partidos sin derrotas, la actuación de Olimpo en el certamen de Transición merece la consideración de apenas discreta. Convalidan el hecho los 12 puntos obtenidos como local y el flojo cometido de ayer en el partido despedida ante Defensa y Justicia, en un empate sin goles que poco aportará para la estadística.

Olimpo navegó en medio de la incertidumbre en un torneo donde mostró algunos destellos ante rivales encumbrados (Lanús, River y Racing) y se desdibujó con otros, al margen de las goleadas recibidas en Vélez y Banfield, a los que en teoría debería haber vencido en Bahía: Rosario Central y Defensa y Justicia.

Precisamente, el Halcón de Florencio Varela resultó ayer un hueso duro de roer.

Con orden, presión (la ejercieron con aciertos Leyes y Bertocchi), dinámica y algunos desequilibrios individuales, como el de Ciro Rius, Defensa transformó en figura al golero Champagne. A eso se debe sumar los buenos aportes de Moiraghi y la falta de resolución de un rival decidido, pero sin el plus de un jugador decisivo en el área.

Prevaleciendo en la zona neurálgica, la visita dejó una mejor imagen en el primer tiempo, donde Nereo Champagne se revolcó tres veces para tapar jugadas claritas de gol (un cabezazo de Villanueva en contra, un remate defectuoso de Rius y una acción inesperada donde la nuca de Nereo se interpuso al disparo de Yacob).

A Olimpo le faltó creatividad en ataque y ofreció ventajas cuando lo cargaron con las pelotas aéreas. El fondo mostró fisuras, Blanco no pudo imponer su oficio y los colombianos anduvieron siempre a contramano.

Defensa, en cambio, impuso superpoblación en el medio (jugó con tres en el fondo) y allí sobresalió la labor del doble 5 (Leyes y Bertocchi), además de algunas apariciones de Camacho y el talento de Rius, quien aprovechó muy bien los espacios.

El cambio de ritmo que imprimió Olimpo en el complemento pareció otorgarle otra fisonomía al partido. Al menos se intentó abrir la cancha, sumar gente en ataque y buscar con mayor resolución a los delanteros.

Borja aguantó un balón en ataque, hizo la pausa y le cedió el gol a Cuero. Pero su coterráneo apuró el disparo y elevó demasiado el balón.

Un rato más tarde, ya con Vidal en cancha, Moiraghi guapeó en el medio y abrió para el juvenil delantero, quien ensayó un centro para el remate frontal de Gil, a quien le faltó dirección.

Las variantes posteriores (entraron Olivares y Vega) aportaron en cuentagotas. Es más, Defensa se volvió a topar con la figura de Champagne., quien le ahogó el grito a Rius y luego al uruguayo Camacho.

Sobre el final pudo haber sido de Vidal (desvió la trayectoria del balón tras un zurdazo de Adrián Martínez), pero en el balance Olimpo quedó en deuda con su gente. Como tantas otras veces a lo largo del certamen.

lanuevaprovincia.com

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