Por Juan Vitta *
El SUTEBA Florencio Varela pidió a la Directora General de Escuelas la intervención del Consejo Escolar y, ahora, a nadie le parece correcto.
Algunos se sienten tranquilos con el informe que pidieron, otros “cumplieron su deber” con un comunicado (hablo de partidos de oposición); una consejera 40 días después se acordó de pedir paso al costado y el municipio repite por lo bajo que no tiene nada que ver (y se olvida que la mayoría estaba en su lista).
Los gremios que “representan” a trabajadores del consejo no emitieron opinión como si no los implicara un sumario para cortar el hilo por lo mas delgado, otros gremios docentes, al parecer muy combativos y que se llenan la boca hablando de los comedores, no se sienten interpelados por un cuarto de millón de pesos del servicio alimentario desaparecidos mágicamente.
Finalmente, otros concejales, que han dado muchas opiniones sobre el tema, dicen que el pedido de intervención es oportunista y que ellos están llamados a cuidar las instituciones, recostándose para esperar que algún día actúe la justicia.
En mi opinión, oportunista es esperar a ver para donde da el viento para luego mostrarse o subirse a un problema queriendo arriesgar lo menos posible.
El SUTEBA (podríamos ofrecer el archivo de este medio para constatarlo) no ha dejado pasar mes en los últimos veinte años en donde no hubiera accionado para lograr que cada chico que lo necesitara tuviera alimento digno, en un ambiente digno, servido en forma decorosa.
Solo a modo de ejemplo, a muy pocos de los que ahora callan o hablan, a muy pocos se los vio cuando se declarara la emergencia por la gripe H1N1 repartiendo alimentos secos en cada escuela como se vio a miembros de conducción y delegados del SUTEBA, ni participando en las denuncias que produjeron la anterior intervención ni, mucho menos, poniendo el cuerpo en acciones de reclamo junto a padres, docentes y alumnos que incluyeron movilizaciones, ollas populares y hasta, ocupaciones del edificio.
Como maestro me siento orgulloso que, una vez más, este gremio se ponga al frente de un reclamo, no para sacar un poco de rédito sino para lograr que los fondos públicos se utilicen en lo que corresponda, máxime si son los alumnos.
Como hacían las abuelas que nos enseñaron a gustar de la sopa dándonos otro plato, la transparencia en la democracia se mejora con más Democracia.
Una intervención a esta altura puede devenir en desafuero del conjunto de consejeros y provocar una nueva elección, solamente de consejo escolar, logrando al fin, tener un cuerpo de consejeros totalmente renovado, en nombres y espíritu.
Soluciones como esa, hoy en manos de la ministra De Lucia, pero donde intervienen todo el resto de los actores mencionados, fortalecen más las instituciones que seguir escondiendo la basura (o las chequeras) bajo la alfombra.
infosurdiario.com.ar
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